lunes, 25 de agosto de 2008

LA VIVIENDA EN VENEZUELA: UN DRAMA DE NUNCA ACABAR,..



Un drama de nunca acabar,..


SITUACION DE LA VIVIENDA EN VENEZUELA (I)


Por Carlos Barreto Caballero


Nuestro estado nacional, que abarca nuestro territorio (casi el Millón de Km2) y la población venezolana, (27 millones, aproximadamente), arrojan un déficit acumulado de unos 2 millones de viviendas, para un déficit interanual acumulable en el orden del 8/10%. Es decir, se deberían producir al menos unas 250 mil viviendas cada año, para ir paliando el déficit acumulable cada año. Sin aún entrar a cubrir el déficit acumulado de viviendas. Tremendo reto. Tremenda deuda social.

Lo que hoy se produce (incluyendo la sumatoria del sector público y privado) no alcanza siquiera para cubrir el 50% del déficit acumulable. Triste balance para un país con tan formidables recursos financieros, un sector privado vigoroso en el sector construcción, y un gobierno que se supone y reputa de ser el gobierno de mayor inclusión social en la historia republicana de Venezuela.

Recientemente el Ejecutivo Nacional promulgó una serie de leyes orgánicas, de alto impacto en el área económica y social. Ello lo hizo dentro del marco facultativo de la Ley Habilitante, en los últimos días de vigencia de aquella. Especial mención merece, aunque hasta ahora no se le haya hecho mención alguna, la nueva reglamentación en materia de vivienda y hábitat.

El propio Presidente señaló que “la nueva Ley de Vivienda incrementará la capacidad del Estado y del pueblo en la solución del problema de las viviendas,…, dándole un rol protagónico a los consejos comunales, tanto en la planificación y control urbano, como en la promoción, construcción y distribución de las unidades habitacionales”.

En realidad el gobierno tácitamente reconoció su fracaso en materia de viviendas, pero nuevamente apostó a la tesis de un mayor centralismo y al menos en teoría, una mayor preponderancia de los sectores populares organizados (los consejos comunales) en debida coordinación con los organismos correlativos del gobierno central.



CAUSAS DEL FRACASO BOLIVARIANO EN VIVIENDAS.


Desde comienzos de la Administración Chávez, el tema de vivienda generalmente ocupó la agenda pública mediática. Fueron más las exposiciones que las realizaciones. Pero siempre estuvo allí.

A partir de 1999, se delineó una Política Nacional de Vivienda en Venezuela con alto espíritu altruista y sentido de inclusión social. Se presentaba la posibilidad de fraguar una formidable alianza entre los diferentes sectores estratégicos concurrentes al hecho productivo de viviendas.
Pero lamentablemente aquello fue un total fracaso. Veamos algunas de las causas de este estruendoso fracaso:
· PUGNAS Y CONFLICTOS POR EL PODER. Problemas históricos de diversa índole acosan la sociedad venezolana y no permiten aprovechar las potencialidades provenientes de distintos actores sociales. Los conflictos originados en el control del poder político y económico han impedido conciliar la voluntad de ejercer la gobernabilidad en los distintos estamentos administrativos.

· INOPERANCIA OFICIAL. Los asentamientos informales constituyen la principal evidencia físico-espacial del fracaso en la conducción de la planificación y gestión urbanas. Conforman la evidencia de la inoperancia en afrontar las causas estructurales de la pobreza, marginalidad e inequidad de la sociedad en su conjunto.

· FALTA DE POLÍTICAS PÚBLICAS COHERENTES Y SUSTENTABLES. En un panorama de incertidumbre como el que actualmente atraviesa la nación venezolana, pareciera que se alejan las posibilidades de alcanzar las condiciones deseadas y esbozadas en las intenciones del Programa II de Habilitación Física de Zonas de Barrios internacionalmente reconocido.


· PERMANENTE INCERTIDUMBRE Y DESESPERANZA DE LOS SECTORES POPULARES. La sensación de haber iniciado un camino prometedor y haberlo abortado tan pronto, deja un sentimiento de desazón, desesperanza y ansiedad.


UNA MIRADA A LA VIVIENDA ENTRE 1999 Y 2004
En la Política de Vivienda, enunciada al inicio de la gestión del actual Gobierno venezolano, destacaba como pivote estructural el Programa de Habilitación Física de las Zonas de Barrios. Se trataba de un conjunto de actuaciones orientadas a la proyección y construcción de obras de infraestructuras y equipamientos necesarios para integrar a los asentamientos informales con el resto de la ciudad.
A pesar de la elaboración de Planes y Proyectos en distintas urbes venezolanas, la situación cambió muy poco. Los problemas se multiplicaron; la deuda social con las comunidades creció; la situación de riesgo de la población, que habita estas zonas, se tornó dramática, adosada con el detonante de la inseguridad urbana.
Las causas eran y aún siguen siendo estructurales. El acelerado crecimiento de las ciudades, experimentado en las últimas décadas, se caracteriza por una marcada exclusión de la población en el acceso al mercado de la tierra urbana y la vivienda formal, lo que se traduce en incuestionables procesos de exclusión social y segregación espacial.
Las consecuencias para las ciudades son evidentes: una acelerada ocupación de espacios signados, desde su nacimiento, por la precariedad. Incremento de los niveles de vulnerabilidad de un grueso sector de la población y se aumento del círculo de marginalidad y pobreza. Esta triste realidad social constituye uno de los mayores problemas que se vislumbran en el siglo XXI para Latinoamérica y el mundo, en general.



ORÍGENES DEL ACTUAL HACINAMIENTO URBANO,..
En estas espacialidades urbanas, se acumulan valores negativos, que acentúan la exclusión: ilegalidad en la ocupación del suelo, condiciones inadecuadas de las viviendas, hacinamiento, dificultad para acceder a los servicios públicos domiciliarios, inexistencia de equipamientos colectivos, problemas de accesibilidad y movilidad, ausencia de espacios públicos e inseguridad.
En Venezuela, al igual que en el resto de Latinoamérica, el surgimiento y avanzada de los denominados asentamientos informales, en la constitución de las ciudades, ha sido avasallante. Actualmente, más del 50% de la población urbana vive en esta modalidad precaria del hábitat, lo que equivale a unos 14 millones de personas en una superficie de 180.000 hectáreas.
Estas lamentables condiciones, ha impedido a estos ciudadanos disfrutar de los beneficios de la vida urbana, confinándoles a un ámbito muy reducido dentro de los límites de su barrio, su calle o su vivienda. Este es el círculo vicioso de nuestra pobreza y marginalidad urbana.
Esta situación no es nueva, de ninguna manera. Según el médico sanitarista José María Bengoa y Lecanda, publicado en 1942, Teolinda Bolívar e Iris Rosas expresaban en 1999: “…los problemas que hoy toman para nosotros prioridad, ya se avizoraban en 1941, cuando el Área Metropolitana de Caracas apenas tenía una población de 354 mil habitantes y `las viviendas en los cerros´ contenían el 12,74% de su población total.
Ante la difícil situación, el Estado venezolano ha ejecutado distintas actuaciones, que abarcan desde la erradicación de los asentamientos informales hasta su reconocimiento y habilitación. La sustitución de ranchos existentes por viviendas salubres dentro de la Política Nacional de Vivienda del Banco Obrero, formulada en 1946, o la denominada Batalla contra el Rancho de 1952, corresponden a las primeras actuaciones.
Las más recientes, de reconocimiento y habilitación, se enmarcan en la Ley Orgánica de Ordenación Urbanística (LOOU) de 1987 y la Política Nacional de Vivienda de 1999. Continuaremos en nuestra próxima entrega.
CARLOS BARRETO CABALLERO

POLTITICA DE VIVIENDA EN VENEZUELA (1999 - 2007)

Un drama de nunca acabar,..
SITUACION DE LA VIVIENDA EN VENEZUELA (I)





Donde estamos,....
Nuestro estado nacional, que abarca nuestro territorio (casi el Millón de Km2) y la población venezolana, (27 millones, aproximadamente), arrojan un déficit acumulado de unos 2 millones de viviendas, para un déficit interanual acumulable en el orden del 8/10%. Es decir, se deberían producir al menos unas 250 mil viviendas cada año, para ir paliando el déficit acumulable cada año. Sin aún entrar a cubrir el déficit acumulado de viviendas. Tremendo reto. Tremenda deuda social.

Lo que hoy se produce (incluyendo la sumatoria del sector público y privado) no alcanza siquiera para cubrir el 50% del déficit acumulable. Triste balance para un país con tan formidables recursos financieros, un sector privado vigoroso en el sector construcción, y un gobierno que se supone y reputa de ser el gobierno de mayor inclusión social en la historia republicana de Venezuela.

Recientemente el Ejecutivo Nacional promulgó una serie de leyes orgánicas, de alto impacto en el área económica y social. Ello lo hizo dentro del marco facultativo de la Ley Habilitante, en los últimos días de vigencia de aquella. Especial mención merece, aunque hasta ahora no se le haya hecho mención alguna, la nueva reglamentación en materia de vivienda y hábitat.

El propio Presidente señaló que “la nueva Ley de Vivienda incrementará la capacidad del Estado y del pueblo en la solución del problema de las viviendas,…, dándole un rol protagónico a los consejos comunales, tanto en la planificación y control urbano, como en la promoción, construcción y distribución de las unidades habitacionales”.

En realidad el gobierno tácitamente reconoció su fracaso en materia de viviendas, pero nuevamente apostó a la tesis de un mayor centralismo y al menos en teoría, una mayor preponderancia de los sectores populares organizados (los consejos comunales) en debida coordinación con los organismos correlativos del gobierno central.


CAUSAS DEL FRACASO BOLIVARIANO EN VIVIENDAS.


Desde comienzos de la Administración Chávez, el tema de vivienda generalmente ocupó la agenda pública mediática. Fueron más las exposiciones que las realizaciones. Pero siempre estuvo allí.

A partir de 1999, se delineó una Política Nacional de Vivienda en Venezuela con alto espíritu altruista y sentido de inclusión social. Se presentaba la posibilidad de fraguar una formidable alianza entre los diferentes sectores estratégicos concurrentes al hecho productivo de viviendas.
Pero lamentablemente aquello fue un total fracaso. Veamos algunas de las causas de este estruendoso fracaso:
· PUGNAS Y CONFLICTOS POR EL PODER. Problemas históricos de diversa índole acosan la sociedad venezolana y no permiten aprovechar las potencialidades provenientes de distintos actores sociales. Los conflictos originados en el control del poder político y económico han impedido conciliar la voluntad de ejercer la gobernabilidad en los distintos estamentos administrativos.

· INOPERANCIA OFICIAL. Los asentamientos informales constituyen la principal evidencia físico-espacial del fracaso en la conducción de la planificación y gestión urbanas. Conforman la evidencia de la inoperancia en afrontar las causas estructurales de la pobreza, marginalidad e inequidad de la sociedad en su conjunto.

· FALTA DE POLÍTICAS PÚBLICAS COHERENTES Y SUSTENTABLES. En un panorama de incertidumbre como el que actualmente atraviesa la nación venezolana, pareciera que se alejan las posibilidades de alcanzar las condiciones deseadas y esbozadas en las intenciones del Programa II de Habilitación Física de Zonas de Barrios internacionalmente reconocido.


· PERMANENTE INCERTIDUMBRE Y DESESPERANZA DE LOS SECTORES POPULARES. La sensación de haber iniciado un camino prometedor y haberlo abortado tan pronto, deja un sentimiento de desazón, desesperanza y ansiedad.


UNA MIRADA A LA VIVIENDA ENTRE 1999 Y 2004
En la Política de Vivienda, enunciada al inicio de la gestión del actual Gobierno venezolano, destacaba como pivote estructural el Programa de Habilitación Física de las Zonas de Barrios. Se trataba de un conjunto de actuaciones orientadas a la proyección y construcción de obras de infraestructuras y equipamientos necesarios para integrar a los asentamientos informales con el resto de la ciudad.
A pesar de la elaboración de Planes y Proyectos en distintas urbes venezolanas, la situación cambió muy poco. Los problemas se multiplicaron; la deuda social con las comunidades creció; la situación de riesgo de la población, que habita estas zonas, se tornó dramática, adosada con el detonante de la inseguridad urbana.
Las causas eran y aún siguen siendo estructurales. El acelerado crecimiento de las ciudades, experimentado en las últimas décadas, se caracteriza por una marcada exclusión de la población en el acceso al mercado de la tierra urbana y la vivienda formal, lo que se traduce en incuestionables procesos de exclusión social y segregación espacial.
Las consecuencias para las ciudades son evidentes: una acelerada ocupación de espacios signados, desde su nacimiento, por la precariedad. Incremento de los niveles de vulnerabilidad de un grueso sector de la población y se aumento del círculo de marginalidad y pobreza. Esta triste realidad social constituye uno de los mayores problemas que se vislumbran en el siglo XXI para Latinoamérica y el mundo, en general.

ORÍGENES DEL ACTUAL HACINAMIENTO URBANO,..
En estas espacialidades urbanas, se acumulan valores negativos, que acentúan la exclusión: ilegalidad en la ocupación del suelo, condiciones inadecuadas de las viviendas, hacinamiento, dificultad para acceder a los servicios públicos domiciliarios, inexistencia de equipamientos colectivos, problemas de accesibilidad y movilidad, ausencia de espacios públicos e inseguridad.
En Venezuela, al igual que en el resto de Latinoamérica, el surgimiento y avanzada de los denominados asentamientos informales, en la constitución de las ciudades, ha sido avasallante. Actualmente, más del 50% de la población urbana vive en esta modalidad precaria del hábitat, lo que equivale a unos 14 millones de personas en una superficie de 180.000 hectáreas.
Estas lamentables condiciones, ha impedido a estos ciudadanos disfrutar de los beneficios de la vida urbana, confinándoles a un ámbito muy reducido dentro de los límites de su barrio, su calle o su vivienda. Este es el círculo vicioso de nuestra pobreza y marginalidad urbana.
Esta situación no es nueva, de ninguna manera. Según el médico sanitarista José María Bengoa y Lecanda, publicado en 1942, Teolinda Bolívar e Iris Rosas expresaban en 1999: “…los problemas que hoy toman para nosotros prioridad, ya se avizoraban en 1941, cuando el Área Metropolitana de Caracas apenas tenía una población de 354 mil habitantes y `las viviendas en los cerros´ contenían el 12,74% de su población total.
Ante la difícil situación, el Estado venezolano ha ejecutado distintas actuaciones, que abarcan desde la erradicación de los asentamientos informales hasta su reconocimiento y habilitación. La sustitución de ranchos existentes por viviendas salubres dentro de la Política Nacional de Vivienda del Banco Obrero, formulada en 1946, o la denominada Batalla contra el Rancho de 1952, corresponden a las primeras actuaciones.
Las más recientes, de reconocimiento y habilitación, se enmarcan en la Ley Orgánica de Ordenación Urbanística (LOOU) de 1987 y la Política Nacional de Vivienda de 1999. Continuaremos en nuestra próxima entrega.
CARLOS BARRETO CABALLERO

miércoles, 13 de agosto de 2008

LEYES ECONOMICAS HABILITANTES: AVANCE HACIA LA JUSTICIA SOCIAL(?)



LEYES ECONOMICAS HABILITANTES:

AVANCE HACIA LA JUSTICIA SOCIAL

Por Carlos Barreto Caballero


Recientemente escribimos acerca de de una serie de medidas que el Ejecutivo tomó hace escasos dos meses, que denominaron el REIMPULSO PRODUCTIVO. Todo ello, dentro de un gran jolgorio entre Gobierno y el gran Empresariado Nacional. Especie de segundo aire, en el cual el Ejecutivo Nacional parecía darle un claro mensaje al país y al mundo: La tarea (?) es de todos, entre todos y para todos.


Dijimos en su oportunidad, que dicho paquete de medidas, iba dirigido sobre todo al gran capital, industrial y financiero. Y conllevaban implícita una gran disyuntiva: Un gran recule, admitiendo que el balance nacional en términos socio productivo era altamente desalentador; ó se trataba de una maravillosa táctica, para agarrar un segundo aire y prepararse al mediano plazo, para mayores batallas.



También señalamos que quienes venimos apoyando este proceso, veíamos con inmensa preocupación como es que los factores menos progresistas de la alta dirigencia del proceso, ya no disimulan sus esfuerzos por ahogar en la institucionalidad capitalista las más veraces críticas, sentimientos y luchas revolucionarias de la clase trabajadora y del pueblo oprimido.



Bien, hoy, con la serie de medidas tomadas hace apenas unos días, en el cierre de la vigencia de llamada Ley Habilitante que facultaba al Presidente para legislar en materia económica y social, entre otras materias; esas dudas tienden a dilucidarse. Y no necesariamente para bien. Veamos



LAS MEDIDAS RECIENTES.
Recientemente el Ejecutivo Nacional refrendó un conjunto de Leyes Habilitantes, sobre todo en materia económica y social, dirigidas a “profundizar el proceso socialista bolivariano” y destinadas a “ampliar y concretar el marco jurídico sobre el cual basar este reimpulso al proceso bolivariano,..”


Según fuentes oficiales, las mismas estarán destinadas al desarrollo nacional, al empoderamiento popular y la adaptación de las estructuras del estado al proceso revolucionario y permitirán al Gobierno Nacional introducir importantes cambios estructurales en el sistema económico venezolano.


Así, el Presidente de la República, tras ser habilitado por la Asamblea Nacional (AN) por un período de 18 meses para legislar, anunció la aprobación de un compendio de leyes, (Gaceta Oficial número 38.984), las cuales estarían destinadas a promover el desarrollo nacional en áreas como soberanía alimentaria, vivienda, transporte, banca, administración pública, turismo y seguridad social.



En tal sentido mencionó la transformación de las instituciones del Estado; la participación popular; los valores esenciales del ejercicio de la función pública; el ámbito económico y social; el financiero y tributario; seguridad y defensa; la infraestructura, transporte y servicios, y el ámbito energético. Ese será el principal ámbito de este compendio de leyes.



Era de prever que las mismas generarían rechazo y resistencia de ciertos sectores económicos. Sobre todo en ciertos sectores industriales, alimentarios y financiero. Las principales críticas han estado dirigidas en el mismo anterior sentido: la supuesta inconstitucionalidad y la excesiva discrecionalidad del poder Ejecutivo para arbitrar según su antojo.



En el pasado, los flancos de ataque fueron la Ley de Tierras, que se oponía al latifundio, y la Ley de Pesca, protectora de los pescadores artesanales. Ambas derivadas del mandato constitucional. Críticas que sobre la macha resultarían sesgadas, infructuosas e infundadas. Dichos atacantes hoy vuelven por sus fueros.



Pero no desestimemos dichas críticas. Pues también hemos de recordar que en aquella oportunidad, estos fueron los principales detonantes para que los enemigos del proceso bolivariano, iniciaran, primero un paro laboral indefinido y luego, el golpe del 11 de abril de 2002.

SU SENTIDO ESTRATÉGICO.
Este compendio de Leyes supone y pretende dibujar el modelo productivo socialista que está contemplado en el Plan de Desarrollo Económico y Social 2007-2013. De rango constitucional.

Básicamente abarcan: la revisión de los precios, la búsqueda de más ingresos y el control sobre las áreas estratégicas. Reafirman la disposición de que “el Estado conservará el control de las actividades productivas que sean de valor estratégico para el desarrollo”.

Las leyes que fueron aprobadas entre enero de 2007 y mediados de julio de 2008 implicaron la revisión de los decretos de control de precios, reformas tributarias y ajustes de instrumentos para incrementar las fuentes de recursos.

Una novedad es la nueva Ley para la Seguridad Alimentaria. Adicionalmente se establece un marco legal para promover la producción social, la cual en gran medida es manejada por el Estado y las comunidades.

Asimismo están las reformas a las leyes de turismo y de bancos, que estarían previendo mayor injerencia gubernamental en esas actividades.

También destaca el propósito fiscalista del estado. El Ejecutivo nacional creó el fondo para la captación de los recursos excedentes de los entes de la Administración Pública, a lo cual se añade la modificación del texto que rige el diseño del gasto y el endeudamiento así como de las instituciones financieras del Estado.

Los últimos cambios efectuados adicionalmente abarcan la reforma al sistema de vivienda y hábitat así como al esquema de seguridad social. Según lo enumerado en la Gaceta se crea un texto para la defensa de las personas en el acceso a los bienes y servicios.



LEGALIDAD Y LEGITIMIDAD DEL PAQUETAZO.
De entrada hemos de señalar que cualquier denuncia sobre una pretendida ilegalidad ó ilegitimidad de las mismas, viene abortada por la fuerza social y la norma jurídica que ha facultado este mandato. Por lo tanto, las mismas están totalmente ajustadas a derecho, y cualquier crítica a las mismas, habrá de ser a sus aspectos de fondo, no a su forma ó fundamento y/ ó facultad jurídica del Habilitado, ciudadano Presidente de la República.


El motivo y justificación de la norma está claramente establecido y aduce que “son el marco jurídico para concretar la justicia social en favor de la población venezolana, en especial las grandes mayorías, históricamente excluidas de la esfera de intereses de los gobiernos que condujeron los destinos de la nación en la denominada cuarta república, por más de 40 años”.


Los sectores económicos más desprestigiados y recalcitrantes, ciertamente intocables hasta el año 1999, nuevamente se atrevieron a calificar de golpe de estado constitucional, el anuncio hecho por el Ejecutivo Nacional. Puro refrito con el mismo guión.


HACIA DONDE VAMOS.
Definitivamente estamos corriendo el riesgo de ir hacia un despeñadero. Y el riesgo es el corto plazo. Es así por cuanto aún no se define ni garantiza sustentabilidad del modelo socio económico al cual se quiere avanzar. El estado se afianza en su modelo ultra capitalista de estado, desestimando palmariamente el papel de los sectores productivos e incluso laborales. No está claro cual es el marco para impulsar nuevas y mejores fuerzas productivas, y el estado mismo, no se ve en el papel de garantizar la producción y el abastecimiento de todos los productos, bienes y servicios contemplados en los sectores estratégicos de la vida nacional. Además de que ello sería un suicidio. El riesgo inminente es la inflación y el desabastecimiento. O hay concierto nacional, ó avanzamos hacia un precipicio de fondo incalculable.


CARLOS BARRETO CABALLERO/ AGOSTO 2008

martes, 12 de agosto de 2008

DIOS ESTÁ EN EL CONTROL,...




Queridos Amigos , esto es espectacular!!!


DIOS ESTÁ EN EL CONTROL,.....!!



Esta es una oración impresionante. Créelo y serás bendecido. El problema con muchos de nosotros es que no creemos que Dios abrirá una ventana y derramara bendiciones que no tendremos lugar para recibirlas. Reto a cualquier persona a tratar a Dios.



Él es fiel a su palabra. Dios no puede mentir y sus promesas son seguras. Tres cosas le sucederán esta semana que viene:


(1) usted encontrará favor de alguien de quien usted no espera;


(2) usted será demasiado relevante para ser ignorado;


(3) usted se encontrará con Dios y usted nunca será igual otra vez.




Mi oración por usted hoy: Los ojos que están viendo este mensaje no verán ningún mal, Las manos que enviarán este mensaje a otros no trabajarán en vano, La boca que dice Amen a esta oración reirá por siempre.


Permanezca en el amor de Dios enviando esta oración a todos en su lista. ¡Tenga un viaje encantador en la vida! ¡Confíe en el señor con todo su corazón y él nunca le fallará porque él es IMPRESIONANTE!



Si usted necesita de verdad una bendición, continúe leyendo este email: Padre divino, Dios más afable y más amoroso, te ruego que bendigas abundantemente mi familia y a mi. Sé que tú reconoces, que una familia es más que una madre, padre, hermana, hermano, esposo y esposa, pero todos los que crean y confíen en ti.


Padre, mando una oración de suplica de bendiciones no solamente para la persona que me envió esto, pero para mí y para todos a los que he remitido este mensaje. Y que la fuerza de la unión en la oración por los que creen y confían en ti es más poderosa que cualquier otra cosa. Te agradezco de antemano por tus bendiciones.


Dios Padre, libera a la persona que lee esto ahora de deudas y de las cargas por las deudas. Envía tu sabiduría santa que yo pueda ser un buen administrador sobre todo lo que me has dado Padre, yo sé que eres maravilloso y poderoso y como si te obedecemos y caminamos en tu palabra y tenemos la fe de una semilla de mostaza tu derramaras de tus bendiciones.



Te agradezco señor por las bendiciones recientes que he recibido y por las bendiciones que todavía han de venir porque sé que tú aun no has terminado conmigo todavía. En el nombre de Jesús, ruego. Amen TOME 60 SEGUNDOS y envíe esto rápidamente y en horas, usted habrá hecho que una multitud de gente ore a Dios los unos por los otros. Entonces siéntese y mire el poder de Dios trabajando en su vida por hacer la cosa que usted sabe que él ama.

¡Siga Bendecido!!!

jueves, 7 de agosto de 2008

PREEMINENCIA DEL AMOR,...




.....Preeminencia del Amor.....



Si yo hablase lenguas humanas y angélicas,

y no tengo amor, vengo a ser como el metal que resuena o el címbalo que tañe.


Y si yo tuviese el don de la profecía,

y entendiese todos los misterios y toda la ciencia,

y si tuviese toda la fede tal manera que taladrase montañas,

y no tengo amor, nada soy.



Y si repartiese todos mis bienes para dar de comer a los pobres,

y si entregase mi cuerpo para ser quemado,

y no tengo amor, de nada me sirve.


El amor es sufrido, es benigno, el amor no tiene envidia,

el amor no es jatancioso, no se envanece,

no hace nada indebido,

no es egoísta, no se irrita, no guarda rencor,

no disfruta de la injusticia, más se goza en la verdad.


El amor, todo lo sufre,todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.......



SIN AMOR NO HAY NADA,...

SIN AMOR, TODO ES VANIDAD,...

lunes, 4 de agosto de 2008

INSEGURIDAD CIUDADANA Vs DEMOCRACIA Y LIBERTAD




PROCESO BOLIVARIANO EN CRISIS:


INSEGURIDAD CIUDADANA Vs DEMOCRACIA Y LIBERTAD

Por Carlos Barreto Caballero
Mucho se podrá hablar y tratar sobre el tema. Siempre será poco, si acaso no se toman los correctivos de fondo, en forma integral, oportuna e inmediata. La ciudadanía venezolana está secuestrada por el hampa y obligada a recluirse en sus propias casas y/ ó lugares de trabajo. En Venezuela, por el hampa, hoy hay una especie de guerra civil no declarada, ante la mirada impune y a veces hasta cómplice de los cuerpos de seguridad del estado.
El hampa común está desatada y aumenta día a día, en forma voraz e incontrolable. Amenaza con poner en riesgo nuestra propia democracia, por la suma ingobernabilidad producto de esta gran inseguridad, a la que estamos sometidos todos los ciudadanos en este país.
La convivencia y la seguridad, son la condición de libertad en la cual los ciudadanos podemos ejercer nuestros derechos, libertades y deberes sin sentirnos víctimas de amenazas, y así poder gozar de adecuadas condiciones de bienestar y tranquilidad.
Los gobiernos deben hacer todos los esfuerzos para mejorar y hacer sostenible las condiciones de seguridad ciudadana. Son varios los países en Latinoamérica que vienen soportando altos niveles de violencia y delitos. Venezuela y Colombia a la cabeza en la región.
Recientes sondeos de opinión señalan el hampa como la principal causa de muerte en el país. Y la principal preocupación de la ciudadanía. Definitivamente no hay democracia, sin seguridad ciudadana. Pero menos aún habrá esta pretendida Revolución.
En mi opinión, este tema tiene que ser objeto de una política de Estado. Debe haber una obligada concertación de todas las fuerzas políticas, económicas y sociales y llegar a un marco consensuado entre el Gobierno, los distintos actores públicos de la seguridad y la sociedad en su conjunto.

Qué hacer ante tanta seguridad?
La inseguridad ciudadana en Venezuela, con cifras extremadamente altas, amenaza nuestro régimen democrático y la propia gobernabilidad de la nación. Para enfrentar este fenómeno, se debe diseñar una política de estado, con una visión de conjunto y de largo plazo, donde las causas sean un factor que se ha de trabajar correlativamente a sus efectos.
Hoy en el país vemos cómo proliferan los asaltos en carreteras, el accionar del pandillaje y homicidios en manos de sicarios que trabajan para el narcotráfico. Todo ello es una clara muestra de que el delito está creciendo, enseñoreado, impune y rapaz. Definitivamente, la inseguridad ciudadana reclama una mirada interdisciplinaria para entender sus causas, ya que es un fenómeno complejo.

Y cual es el diagnóstico?
Hemos de conocer las causas, para poder atacar el problema de raíz. Este fenómeno social, la delincuencia, ha de ser tratado en forma multidisciplinaria e integral. En la salud, como en la seguridad, siempre será mejor prevenir que curar.
Un estudio realizado por la escuela de Gary Becker, sobre la economía del crimen, nos señala la enorme importancia que tiene un eficaz sistema de prevención y sanción en la expansión del delito. Indica que quienes ingresan al mundo delictivo hacen una elección racional basada en un examen de los costos y beneficios que reporta la actividad ilegal. Así, si las personas que son proclives, si encuentran que los riesgos son bajos frente a muy altas ganancias, estarán muy animados a cometer el delito.
Menú de propuestas.
Los diseños y estrategias deben ser aplicados a cada realidad, sin embargo, hay propuestas que sí se pueden tomar en cuenta para adaptarlas, como por ejemplo:1.Promover una justicia cercana y eficiente a la comunidad.
2. Mejorar los sistemas e infraestructuras carcelarias.
3. Depuración de los malos elementos de seguridad publica y justicia.
4. Profesionalización y capacitación de la policía.
5. Control interno y externo del desempeño policial
6. Información oportuna y rigurosa sobre las ocurrencias delictivas.
7. Priorizar, Prevención vs. Represión.
8. Atención social prioritaria a la juventud.
9. Un trabajo planificado en la violencia intra familiar.
10. Combatir en forma enérgica la comercialización de drogas.
11. Erradicar los puntos de ventas de artículos robados
12. Recuperación de los espacios públicos.
13. Diseñar programas específicos involucrando a cada gobierno local.
14. Contar con un eficiente sistema de denuncias de delitos, este debe ser gratuito.
15. Aumentar la efectividad de los procesos judiciales.
16. Recuperar la confianza en las autoridades.
17. Sensibilizar a la población para promover acciones preventivas y convivencia pacifica.
18. Focalizar los delitos, implementando estrategias por localidad.
19. Cada localidad deberá contar con su D.I.S.
Sin embargo. El telón de fondo que alimenta el espiral delictivo, sigue siendo factores tales como: la falta de consciencia, la impunidad y la exclusión social. Allí es donde hay que trabajar al largo plazo.


DERECHO A LA VIDA.
En Venezuela, en el año 2007, en cifras reales, más de 15.000 personas fueron asesinadas y más de 3.000 perdieron la vida a causa de acciones policiales presentadas como legítima defensa en “enfrentamientos”.

La mayoría de estas muertes ocurrieron en condiciones que sugieren un uso no excepcional, innecesario o desproporcionado de la fuerza, todo lo cual implica violación abierta ó solapada del derecho a la vida. Las muertes provocadas por acciones policiales, presentadas oficialmente como enfrentamientos o “resistencia a la autoridad”, crecieron en más de 500% en los últimos diez años.

Si sumamos las muertes violentas, tanto las cometidas por los particulares como por la policía, llegamos al dramático censo de casi 20.000 víctimas letales de la violencia en 2007. Es decir, aproximadamente 65 homicidios por 100.000 habitantes, mucho más del doble de la media latinoamericana.

En el caso de Caracas, la situación es aún más apremiante: murieron más de 4.000 personas víctimas de homicidio y más de 500 por “resistencia a la autoridad”, es decir, aproximadamente 4.500 muertos a causa de la violencia en la ciudad.

La tasa de homicidios en Caracas se ubica en más de tres veces la media nacional. Si adicionalmente tenemos en cuenta a aquellas víctimas de otras modalidades de violencia que no producen la muerte pero que implican graves agresiones a la integridad física y psicológica de las personas, la magnitud de la crisis de seguridad pública es, más que ostensible, un verdadero problema de Estado.



DISPOSICIONES CONSTITUCIONALES
Artículo 55 de la Constitución de la República Bolivariana de Venezuela
“Toda persona tiene derecho a la protección por parte del Estado a través de los órganos de seguridad ciudadana regulados por ley, frente a situaciones que constituyan amenazas, vulnerabilidad o riesgo para la integridad física de las personas, sus propiedades, el disfrute de sus derechos y el cumplimiento de sus deberes”.

“La participación de los ciudadanos y ciudadanas en los programas destinados a la prevención, seguridad ciudadana y administración de emergencias será regulada por una ley especial”.

“Los cuerpos de seguridad del Estado respetarán la dignidad y los derechos humanos de todas las personas”.

“El uso de armas o sustancias tóxicas por parte del funcionariado policial y de seguridad estará limitado por principios de necesidad, conveniencia, oportunidad y proporcionalidad, conforme a la ley”

Ustedes, amables lectores, entre la teoría ó el deber ser, y la triste realidad, saquen sus propias conclusiones. La historia nos observa,..

CARLOS BARRETO CABALLERO